– Fabricación 100% en planta generando reducción en la huella de carbono y en los costos de traslado, tanto de materiales como de personal.
– Reducción del desperdicio de materiales gracias a la estandarización de procesos.
– Eliminación del agua en el proceso de fabricación.
– Mejora sustancial en calidad de aislación, generando un alto ahorro en energía a la hora de aclimatar un ambiente.
– Uso de materiales con un alto rendimiento y eficiencia, fácilmente reutilizables.